Recientemente ha cancelado una veintena de conciertos y los médicos le aconsejan que deje la música.
Una doble neumonía y una infección de vejiga, entre otros reveses, han puesto al que fuera líder de los Smiths en una delicada situación personal. No ya por la cancelación de su actual gira americana, sino porque incluso puede estar en juego su trayectoria musical.
“Los médicos me han recomendado que lo deje, pero me resultaría muy difícil, pues la música está arraigada en mi”, ha declarado Morrissey en una entrevista con la emisora mexicana Reactor 105.7.
En esta preocupante línea, ha añadido: “Pasé por momentos realmente malos. Tuve una hemorragia interna y me llevaron al hospital porque estaba perdiendo mucha sangre. Trataron de que mejorara durante las siguiente semanas, pero no funcionó, y cada vez que parecía que iba a mejor, recaía. Pero en realidad ahora soy bastante optimista”.
Para un reflexivo Morrissey, es “absurda” la cantidad de cosas que le han pasado en los últimos meses, como si todo le atacara al mismo tiempo. Tanto ha sido así que sus defensas acabaron por los suelos e incluso “la más fina corriente de viento podría provocarme un terrible resfriado”.
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