Vini 'Mad Dog' Lopez se reunió con su antigua banda, que dejó en 1974, durante un concierto en Nueva Jersey.
Bruce Springsteen y la E Street Band arrancó ayer una serie de tres conciertos en el estadio MetLife de Nueva Jersey, con tres horas y 45 minutos de ardiente espectáculo –hasta aquí todo normal–, en el que se pudieron escuchar rarezas como Mansion On The Hill y Human Touch, mezcladas con clásicos y nuevas canciones de Wrecking Ball.
Para los fans más antiguos, lo más destacado fue probablemente el sorprendente regreso del batería original de la E Street Band, Vini 'Mad Dog' (perro loco) Lopez, para tocar el tema The E Street Shuffle. Todo comenzó cuando Max Weinberg (baterista actual) se levantó durante la introducción de la canción: "¿Dónde se ha ido Max?", dijo Springsteen. "¿Qué ha pasado con el batería? Está enfermo… ¡Necesitamos un médico!".
Y en esas, López se sentó en el taburete para interpretar la canción que originalmente tocaba con Springsteen en 1973. El batería, que dejó la banda en el 74, tenía una sonrisa de oreja a oreja todo el tiempo, y tocó el tema. López regresó al escenario más tarde, casi al final del concierto, para tocar la pandereta en 10th Avenue Freeze-Out y Twist and Shout.
Para los fans más antiguos, lo más destacado fue probablemente el sorprendente regreso del batería original de la E Street Band, Vini 'Mad Dog' (perro loco) Lopez, para tocar el tema The E Street Shuffle. Todo comenzó cuando Max Weinberg (baterista actual) se levantó durante la introducción de la canción: "¿Dónde se ha ido Max?", dijo Springsteen. "¿Qué ha pasado con el batería? Está enfermo… ¡Necesitamos un médico!".
Y en esas, López se sentó en el taburete para interpretar la canción que originalmente tocaba con Springsteen en 1973. El batería, que dejó la banda en el 74, tenía una sonrisa de oreja a oreja todo el tiempo, y tocó el tema. López regresó al escenario más tarde, casi al final del concierto, para tocar la pandereta en 10th Avenue Freeze-Out y Twist and Shout.
La gira por estadios de Wrecking Ball finaliza la noche del sábado, en este mismo estadio, en la ciudad del músico. Los fans con entradas se frotan las manos esperando un espectáculo salvaje, especialmente porque a medianoche el cantante cumple 63 años. Las probabilidades de romper la barrera de las cuatro horas son muy altísimas.
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