Fuente: Rolling Stone
Jay Z, Billy Corgan, Sammy Hagar, Gwen Stefani y, por supuesto, Gene Simmons y Stanley de Kiss.
Jay Z dijo una vez aquello de “I’m not a businessman, I’m a business, man” (“no soy un hombre de negocios, soy un negocio, hombre”). Lo cierto es que él es ambas cosas, como algunos de sus colegas de profesión que han expandido sus horizontes más allá de los estudios de grabación, los escenarios y, por supuesto, el merchandising.
Desde líneas de ropa hasta bebidas energéticas, pasando por franquicias de restaurantes, caprichos gastronómicos o incursiones en la lucha libre, a continuación repasamos una quincena de artistas que no se sentaron a esperar el cheque de los royalties.
JAY Z
Jay tiene la cadena de sports bars 40/40 Club, es productor de Hollywood, ha sido propietario de una parte de los Brooklyn Nets, creado su línea de ropa Rocawear y ha establecido patrocinios con Samsung y Budweiser. Pero con lo que realmente hace dinero es expandiendo su empresa de entretenimiento Roc Nation hacia el mundo del management deportivo.
Usando la influencia de Jay para llegar a atletas de alto nivel, Roc Nation Sports fue responsable de que Robinson Cano firmara un contrato de 240 millones de dólares con los Seattle Mariners, y Kevin Duran hiciera lo propio con Nike por 300 millones de dólares.
GWEN STEFANI
Los fans de Gwen no estás especialmente ansiosos por verla de vuelta como coach en el espacio televisivo The Voice, sino que se mueren de ganas de conocer este otoño las novedades de su línea de ropa L.A.M.B. Y es que mientras otros artistas chapotean en el mundo de la moda, Stefani tiene presencia en cientos de tiendas de todo el mundo.
Durante la pasada década, L.A.M.B. (que coje las siglas de su primer disco en solitario,Love, Angel, Music y Baby) facturó alrededor de 90 millones de dólares al año. Este éxito animó a la cantante a expandirse incluyendo en su imperio marcas como Harajuku Lovers y Design With Purpose.
SAMMY HAGAR
The Red Rocker desde luego está viviendo el sueño americano. Si por ese sueño entendemos pasar una década como vocalista de Van Halen, mudarte a Cabo San Lucas (México) y convertir una tienda de tequila en una marca de 100 millones de dólares anuales. Cuando vendió el 80 por ciento de Cabo Wabo en 2007 por 80 millones, éste ya era el segundo tequila premium más vendido de los Estados Unidos. Al final, Sammy terminó vendiendo el resto de la empresa en 2010 por otros 15 millones.
Eso sí, él sigue siendo el propietario del restaurante Cabo Wabo Cantina, así como del Sammy’s Beach Bar & Grill, que tiene seis establecimientos incluyendo Miami y Nueva York.
JIMMY BUFFET
The King of the Parrotheads ha convertido su pasión por tirarse en la playa y emborracharse tomando cocktails en una provechosa industria. En un principio su apuesta por tener su propia franquicia en plan Hard Rock parecía estrafalaria, pero ahora los restaurantes Margaritaville and Cheeseburger in Paradise están en docenas de ciudades desde Australia hasta Waikiki, desde Cincinnati hasta Biloxi.
Una vez establecidos los restaurantes, dio el siguiente paso para tener también sus casinos en Atlantic City, Bossier City y Las Vegas. No contento con esto, firmó un acuerdo con Anheuser-Busch para tener su propia cerveza Land Shark Lager.
50 CENT
Al principio de la historia de Vitamin Water, 50 Cent aceptó apoyar con una pequeña participación en la compañía. Una década después, dicha participación le da unos beneficios de 500 millones de dólares. No todos sus negocios son igual de exitosos (sus alianza con los auriculares de SMS Audio están lejos de los Beats de Dr Dre), pero el rapero tiene una fructífera productora cinematográfica -Cheetah Vision- que factura películas de acción de bajo presupuesto para mercados foráneos.
KISS
Una simple mirada a la tienda de Kiss revela el imperio de merchandising que han creado Gene Simmons y Paul Stanley, con todo tipo de artilugios, entre los que bien puede destacar el Mr Potato personal de la banda. Desde luego, se han convertido en la más rentable marca de la industria musical. Y cuando pensábamos que ya no podría ocurrírseles nada más, estamparon su logo en los cascos del equipo de fútbol americano Los Angeles Kiss. Los dueños del equipo son Paul y Gene, claro.
BILLY JOEL
La pasión del Piano Man por las choppers está más que documentada. Así, su 20th Century Cycles nació de su amor por las motos y por necesidad, puesto que su colección pasó de 75 vehículos y necesitó un lugar para guardarlas. En 2010 creó su propio museo en Long Island, integrado por motocicletas customizadas que no se venden. Pero si alguna vez decidiera hacerlo, podría comprar todos los palcos de lujo para alguno de sus conciertos mensuales en el Madison Square Garden.
NEIL YOUNG
Neil es más un inventor que un empresario, y sus innovaciones responden más a su propia visión del mundo que a su intento de hacer dinero (como el coche bioeléctrico LineVolt en el que ha estado trabajando durante unos cuantos años). El rockero ha defendido históricamente más limpios y eficientes modos de transporte que no esquilmen recursos materiales.
Después de convertir un Lincoln Continental de 1959 en un coche híbrido sólo para demostrar que se puede hacer, ahora quiere enriquecer la experiencia de escuchar música con su reproductor PONO, como respuesta a los archivos planos en MP3.
DEXTER HOLLAND
No puedes crecer en el sur de California y no estar obsesionado con las salsas picantes. Este fiero condimento es un estilo de vida en la costa oeste, y el líder de Offspring ha convertido esta pasión en un negocio boyante. “Pensé que sería guay tener una salsa picante. Las primeras muestras las regalé a mis amigos unas navidades”, rememora Holland sobre Gringo Blandito Hot Sauce, una marca que no ha dejado de crecer desde entonces, y que en la pasada década vendió más de un millón de botes.
JUSTIN TIMBERLAKE
Cantante, compositor, actor, productor, ejecutivo discográfico (Tennman Records), restaurador, inversor en golf, licorero (Sauza 901 Tequila) y propietario en parte de un equipo de la NBA (Memphis Grizzlies). Y una última para redondear: portavoz publicitario del Apple iPhone.
DIDDY
Sus aventuras de alto nivel fuera de la música comenzaron con la línea de ropa Sean John, que le reporta 250 millones de dólares al año, según Business Insider. Diddy es también el rostro de Ciroc Vodka, en una unión entre el músico y el gigante de las bebidas Diageo. Y recientemente se ha embarcado en un proyecto de una cadena televisiva con Revolt, que aspira a ser la nueva MTV.
MAYNARD JAMES KEENAN
Como si ser el líder de Tool, Puscifer y A Perfect Circle no fuera suficiente trabajo, Maynard se embarcó al principio del siglo XXI en otro proyecto para ser un zar vinatero. Tras comprar todas las hectáreas en los alrededores de Sedona (Arizona), Keenan transformó la zona en la base de operaciones de Cadeceus Cellars (que actualmente hace envíos a 23 estados y al DC). Después adquirió los viñedos Merkin e incluso hizo un documental sobre esta pasión en 2010 llamado Blood into Wine.
MARKY RAMONE
Una piza de la Marky Ramone’s Brooklyn Pasta Sauce y te queda claro que el baterista sabe tanto de condimentos como de marcar el ritmo. Marky inició este negocio en 2010, cuando decidió compartir su receta con el resto del mundo. Ahora se venden en lugares tan dispares como tiendas de discos, salas de conciertos, tiendas judías, mercados italianos… y esto solamente en Nueva York. Un 10 por ciento de los beneficios se destinan a la organización benéfica Autism Speaks.
DR DRE
El instinto empresarial del rapero se resume con dos palabras: Beats y Billions. Y todo gracias a sus auriculares Beats, ideados en 2006 junto a Jimmy Iovine, y quep pronto se hicieron populares gracias a Lady Gaga y LeBron James. Los beneficios no dejaron de incrementarse, hasta que en mayo de este año Apple puso sobre la mesa 3 billones de dólares por la empresa en cuestión, llamada Beats Electronics. Y básicamente por esta jugada Dr Dre es el rapero más rico del mundo actualmente.
BILLY CORGAN
El líder de Smashing Pumpkins creó en 2011 su propia liga de lucha libre (pressing catch, si se prefiere), llamada Resistance Pro. El amor de Billy por este espectáculo viene de lejos, y ya en 2008 su banda grabó una canción titulada G.L.O.W. como tributo a Glorious Ladies of Wrestling. Tras cosechar una más que buena acogida en su Chicago natal, el siguiente paso para desbancar a la WWE es lograr un contrato televisivo… algo que ya tiene, pues AMC hará ocho capítulos de la serie Untitled Billy Corgan Wrestling Project.
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